La primera persona con quien conversé en mis incursiones adolescentes por el Jr. Quilca fue Javier, siempre generoso y dispuesto a conversar. Atendía en su puesto cuando la cuadra 1 de la calle que daba a la Plaza San Martín estaba llena de stands que vendían libros, música y posters. Me entero de que ha fallecido hace poco y con pena pienso en cómo mientras la ciudad se transforma la memoria es una forma de resistencia.
Foto: Facebook Vinyl Sound Perú